El OIJ investiga si el menor tenía problemas mentales tras la violenta agresión en Pocora.
Guácimo, Costa Rica — Una mujer de 56 años murió tras recibir una brutal golpiza en su propia casa en Pocora, y el principal sospechoso del crimen sería su nieto adolescente, según informó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
El hecho ocurrió la noche del jueves 9 de octubre, cuando la central de emergencias recibió una alerta sobre un violento ataque dentro de una vivienda en Pocora de Guácimo, provincia de Limón.
La víctima fue identificada como una mujer de apellido Loría, de 56 años, quien fue encontrada inconsciente dentro del domicilio con múltiples golpes en diferentes partes del cuerpo.
De acuerdo con la versión preliminar del OIJ, la mujer se encontraba acompañada por un menor de edad al momento del ataque. Por razones que aún no han sido esclarecidas, el adolescente la habría agredido violentamente.
“Se encontraba dentro de la casa con un menor de edad, y por razones que se desconocen, este habría agredido a la mujer; producto de varios golpes, falleció en el sitio”, informó la oficina de prensa del organismo judicial.
El cuerpo fue trasladado al Complejo de Ciencias Forenses para la autopsia correspondiente, con el fin de determinar la causa exacta de muerte y la naturaleza de las lesiones sufridas.
Hasta el momento, no hay personas detenidas, aunque las autoridades confirmaron que el sospechoso ya fue identificado y permanece bajo observación.
El Ministerio Público analiza si el adolescente podría padecer alguna condición mental o emocional que haya influido en el ataque, lo que podría incidir en la valoración penal del caso.
Vecinos de la comunidad se mostraron consternados por lo ocurrido, describiendo a la víctima como una mujer tranquila y muy cercana a su familia.
“Era una señora amable, siempre salía a caminar por el barrio. Nadie se imagina algo así”, relató una vecina que prefirió mantener su identidad en reserva.
El crimen ocurre en medio de un contexto alarmante de violencia contra las mujeres en Costa Rica. En lo que va de 2025, 59 mujeres han muerto de manera violenta, cifra que ya supera los registros del año anterior para la misma fecha.
Organizaciones sociales han expresado su preocupación ante el aumento de casos en los que los agresores son familiares o personas del entorno cercano.
El OIJ mantiene abiertas varias líneas de investigación, entre ellas la de violencia intrafamiliar, mientras se recopilan pruebas y testimonios en la escena.
Autoridades locales han hecho un llamado a reforzar los mecanismos de prevención y atención temprana de conflictos dentro de los hogares, especialmente aquellos donde conviven menores de edad y adultos mayores.
El Instituto Nacional de las Mujeres (INAMU) reiteró su compromiso de trabajar junto al sistema judicial para garantizar que los casos de violencia de género o intrafamiliar reciban la atención prioritaria que merecen.
Mientras tanto, los allegados de la víctima esperan los resultados forenses para proceder con las honras fúnebres y solicitar justicia por su muerte.
La comunidad de Pocora continúa en shock por el suceso, que ha dejado al descubierto la fragilidad del tejido familiar y la urgencia de intervenir antes de que los conflictos domésticos escalen a tragedias irreversibles.