Vecinos de San Gabriel hallaron un cuerpo con signos de violencia extrema; autoridades investigan el caso.
San José, Costa Rica — La comunidad de San Gabriel de Aserrí amaneció consternada este domingo tras el hallazgo del cuerpo de un hombre con aparentes signos de violencia extrema a la orilla de la carretera. El OIJ investiga el caso como un posible homicidio brutal.
El hallazgo ocurrió alrededor de la 1:00 p.m. del domingo, cuando vecinos que transitaban por una carretera en San Gabriel de Aserrí notaron una figura sospechosa en la cuneta. Al acercarse, descubrieron el cuerpo de un hombre tendido entre maleza y tierra suelta, por lo que alertaron de inmediato a las autoridades.
La Cruz Roja Costarricense confirmó que recibió la llamada de emergencia a las 1:05 p.m. y desplazó una unidad básica al sitio. Al llegar, los socorristas verificaron que el hombre ya no presentaba signos vitales, declarando su fallecimiento en el lugar.
Según versiones preliminares, el cuerpo mostraba signos de una violencia extrema. Algunos testigos afirmaron que presentaba mutilaciones y posibles quemaduras, aunque el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) aún no ha confirmado oficialmente estos detalles.
Los agentes judiciales de la sección de Homicidios acordonaron el área y comenzaron con la recolección de indicios. La escena fue resguardada por oficiales de la Fuerza Pública mientras los peritos realizaban el levantamiento del cuerpo y tomaban evidencia fotográfica y balística.
De momento, la identidad de la víctima se mantiene sin confirmar. Se trata de un hombre de mediana edad, y las autoridades trabajan en la identificación mediante huellas dactilares y otros métodos forenses.
Vecinos de San Gabriel manifestaron su consternación ante lo ocurrido. Algunos describieron el hecho como algo “nunca visto” en la zona, tradicionalmente tranquila y alejada de los altos índices de violencia que afectan otras regiones del país.
“Esto nos tiene a todos asustados, porque aquí no pasan esas cosas. Es un barrio pequeño, todos nos conocemos”, comentó una vecina, visiblemente afectada por la situación.
El OIJ mantiene varias líneas de investigación abiertas. No se descarta que el crimen esté relacionado con disputas personales, ajustes de cuentas o incluso traslados de víctimas desde otras localidades.
Fuentes cercanas al caso indicaron que la forma en que se encontró el cuerpo sugiere un mensaje o advertencia, lo cual es característico de crímenes vinculados con organizaciones criminales. Sin embargo, las autoridades insisten en que aún es prematuro emitir conclusiones.
El cuerpo fue trasladado a la Morgue Judicial en San Joaquín de Flores para la autopsia respectiva, con el fin de determinar las causas exactas de la muerte y confirmar si hubo desmembramiento o uso de fuego.
En las horas posteriores al hallazgo, la Fuerza Pública reforzó la presencia policial en los alrededores de Aserrí, mientras equipos de investigación recorren la zona en busca de cámaras de seguridad o testigos adicionales.
El hecho se suma a una serie de crímenes violentos registrados en los últimos meses en el Gran Área Metropolitana, lo que ha elevado la preocupación sobre el aumento de la criminalidad en zonas residenciales.
El alcalde de Aserrí, consultado por medios locales, expresó su preocupación y pidió reforzar los patrullajes. “Es inaceptable que nuestra comunidad viva con miedo. Necesitamos más presencia policial y respuestas rápidas”, declaró.
Mientras el OIJ continúa con las pericias, el caso ha generado una fuerte reacción en redes sociales, donde ciudadanos expresan su temor y exigen medidas más contundentes contra la violencia que, aseguran, “ya no distingue provincia ni clase social”.