El ataque frente a un bar en el centro de Limón estaría ligado a disputas criminales por control de territorio.
Limón, Costa Rica — Un violento tiroteo registrado la madrugada del domingo frente a un bar en el centro de Limón dejó dos personas muertas y cinco heridas, según confirmó el OIJ.
La madrugada del 31 de agosto quedó marcada por la violencia en el Caribe costarricense. Frente al bar Don Juan, en el centro de Limón, sicarios que viajaban en motocicleta abrieron fuego contra un grupo de personas que se encontraban en la vía pública.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) reportó la muerte de dos personas y al menos cinco heridos, quienes fueron trasladados de emergencia al Hospital Tony Facio.
En la escena se contabilizaron 24 casquillos de bala calibre .40, ahora parte de la evidencia bajo análisis en las investigaciones.
Las autoridades identificaron a las víctimas mortales. Uno de ellos fue un hombre de apellidos Sevilla, de 47 años, señalado como el blanco de los atacantes. El cuerpo presentaba heridas en el cuello, los brazos y el abdomen.
La segunda víctima fue una mujer de apellidos Martínez, de 34 años, considerada víctima colateral del ataque. Recibió múltiples impactos en el tórax, piernas, espalda y costado izquierdo.
Según el subdirector del OIJ, Michael Soto, la mujer se encontraba en el lugar de manera circunstancial. “Pasó una motocicleta con el objetivo de asesinar a un masculino. Sin embargo, los sujetos dispararon en varias ocasiones, provocando la muerte del hombre que en apariencia era el objetivo y de una mujer inocente”, explicó.
Del total de heridos, tres son mujeres y uno es hombre. Todos recibieron atención inmediata en el centro médico.
El ataque se suma a una ola de violencia que ha golpeado a Limón en los últimos meses, donde los tiroteos y ajustes de cuentas han dejado varias víctimas.
Las autoridades vinculan este tipo de hechos a disputas entre bandas criminales por el control de territorios estratégicos para el narcotráfico.
Vecinos de la zona manifestaron su preocupación por la inseguridad y el riesgo de quedar atrapados en medio de los enfrentamientos.
“El miedo es constante, uno ya no sabe si salir de noche porque cualquier persona puede quedar en el fuego cruzado”, comentó una residente cercana al lugar del ataque.
El Ministerio de Seguridad Pública reforzó los patrullajes en la provincia, aunque reconocen la dificultad de contener la violencia ligada a estructuras criminales organizadas.
Los investigadores analizan cámaras de seguridad y testimonios para identificar a los sicarios responsables. Hasta el momento, no se reportan detenciones vinculadas al caso.
El OIJ destacó que la dinámica del ataque muestra un patrón repetido: sicarios en motocicleta, ráfagas indiscriminadas y víctimas colaterales.
En paralelo, las autoridades hacen un llamado a la ciudadanía a colaborar con información que pueda ayudar a esclarecer el hecho.
El violento episodio pone nuevamente en el centro del debate el impacto del crimen organizado en la seguridad de Limón y la urgencia de medidas integrales para frenar la escalada.