Cae Jonathan Arias, tercer costarricense arrestado para extradición a EE. UU. en menos de una semana. Caso Venus genera impacto.
Jonathan Arias es el tercer costarricense arrestado en una semana para ser extraditado a EE. UU. por narcotráfico.
San José, Costa Rica — La seguidilla de capturas por solicitud de Estados Unidos suma un nuevo nombre: Jonathan Arias Alfaro. El costarricense fue detenido esta semana en el marco del “Caso Venus”, convirtiéndose en el tercer extraditable arrestado en menos de siete días, en una operación que refuerza la presión internacional sobre redes criminales en el país.
Costa Rica se encuentra en el epicentro de una ofensiva internacional contra el crimen organizado. Este miércoles, autoridades del OIJ confirmaron la detención de Jonathan Arias Alfaro, señalado por la DEA como parte de una red de narcotráfico investigada en Estados Unidos.
La aprehensión de Arias se realizó en el contexto del “Caso Venus”, una causa independiente de las que vinculan al exmagistrado Celso Gamboa y al exconvicto Edwin “Pecho de Rata” López, ambos también con procesos de extradición en curso.
La detención de Arias confirma que no se trata de un operativo aislado, sino de una estrategia multinivel donde diversas células criminales están siendo desarticuladas en simultáneo.
Aunque el contenido exacto del expediente de Arias permanece bajo reserva, fuentes judiciales aseguran que la solicitud formal de extradición proviene de una corte federal estadounidense, bajo cargos graves de narcotráfico internacional.
“El mensaje es claro: ya no hay impunidad. La cooperación judicial con Estados Unidos está dando resultados contundentes”, comentó un exfiscal consultado por CRN Mundo Noticias.
A diferencia de los casos anteriores, el arresto de Arias evidencia que las investigaciones no solo apuntan a estructuras de poder conocidas, sino también a redes paralelas que operan bajo el radar.
El “Caso Venus” ha sido desarrollado con apoyo de agencias internacionales de inteligencia, lo que evidencia un grado alto de coordinación y seguimiento técnico por parte de autoridades estadounidenses.
En lo que va de junio, esta es la tercera captura de un ciudadano costarricense que enfrentará un proceso de extradición. Las autoridades locales aseguran que estos procedimientos cumplen con todas las garantías del debido proceso y los tratados bilaterales vigentes.
Jonathan Arias permanecerá bajo custodia mientras se tramita la solicitud de extradición, que deberá ser valorada por un juez nacional. Este determinará si procede su envío a Estados Unidos, donde enfrentaría cargos penales.
Especialistas consideran que esta serie de detenciones marca un punto de inflexión. “Costa Rica está dejando atrás la imagen de refugio para capos. Ahora se está mostrando como un país dispuesto a colaborar activamente con la justicia internacional”, señaló el analista Gustavo Retana.
Además, estas capturas fortalecen la percepción de que la nueva reforma constitucional —que permite extraditar a costarricenses por delitos graves— empieza a rendir frutos tangibles.
El caso de Arias, sumado al de Gamboa y López, evidencia un patrón de acción estratégica por parte de las agencias de seguridad, que estarían atacando simultáneamente a diferentes estructuras del narcotráfico nacional.
Para la ciudadanía, estos arrestos generan una mezcla de sorpresa, expectativa y esperanza: el temor a la impunidad comienza a erosionarse, aunque queda mucho camino por recorrer.
El OIJ reiteró que no descartan más capturas en los próximos días, ya que las investigaciones continúan activas.
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