Adolescente en Brasil mató a su familia y declaró: “Lo volvería a hacer”. Crimen genera alarma social.
El menor confesó el triple crimen y declaró sin culpa: “Lo volvería a hacer”.
Itaperuna, Brasil — Con una frialdad que ha estremecido a todo Brasil, un adolescente de 14 años confesó haber matado a sus padres y a su hermano de tres años. Durante su interrogatorio, el joven pronunció una frase macabra: “Lo volvería a hacer”.
Un crimen que parece salido de una novela de terror ha sacudido a Brasil y levantado una fuerte alarma social. En la ciudad de Itaperuna, estado de Río de Janeiro, un adolescente de apenas 14 años fue detenido tras confesar que asesinó a su familia a sangre fría.
Los hechos ocurrieron el pasado sábado 21 de junio, según confirmó la Policía Civil. El menor habría esperado a que sus padres se durmieran antes de dispararles en la cabeza con un arma registrada a nombre de su padre.
Después, se dirigió hacia su hermanito de apenas tres años y le disparó en el cuello. Luego de cometer el crimen, escondió los cuerpos de las tres víctimas en un estanque ubicado en la propiedad familiar.
Lo que más ha estremecido a los investigadores es la actitud del menor. Durante su declaración formal ante las autoridades, el adolescente dijo con absoluta serenidad: “Lo volvería a hacer”.
El adolescente había planeado escapar a Mato Grosso para encontrarse con una adolescente de 15 años con quien mantenía una relación virtual, la cual comenzó a través de un videojuego en línea.
La policía informó que el joven ya había realizado búsquedas relacionadas con empleo en la ciudad de Água Boa, lugar donde reside la adolescente.
Tras cometer el crimen, el menor tomó los teléfonos móviles de sus padres y los guardó en su mochila. Luego, mintió a sus familiares asegurando que su hermanito se había lastimado y que sus padres lo habían llevado al hospital.
Sin embargo, las inconsistencias en su relato alertaron a sus tíos y vecinos. Finalmente, confesó el triple homicidio a un familiar, quien de inmediato contactó a la policía.
El menor fue capturado y se le dictó detención provisional por 45 días, en espera de ser juzgado por triple homicidio calificado y ocultamiento de cadáver.
La principal hipótesis del caso apunta a una reacción violenta frente a la negativa de sus padres de permitirle viajar a Mato Grosso. Las autoridades también investigan si la joven con quien mantenía el vínculo digital estaba al tanto de sus intenciones.
Especialistas forenses analizan el entorno familiar del adolescente. Se sabe que el padre le había enseñado a disparar armas y practicar artes marciales desde temprana edad.
El caso ha abierto un debate nacional sobre el acceso de menores a armas, los riesgos de relaciones virtuales intensas y la necesidad urgente de atender la salud mental adolescente.
“Cuando un menor es capaz de planear y ejecutar un acto de esta magnitud sin mostrar culpa, debemos preguntarnos qué falló a su alrededor”, declaró un psiquiatra forense consultado por medios locales.
En Costa Rica y otros países de la región, aunque estos hechos no son comunes, expertos insisten en que los padres deben monitorear el entorno digital de sus hijos y prestar atención a cambios en su comportamiento.
Este crimen reaviva una pregunta crucial: ¿Cómo identificar a tiempo a un menor emocionalmente inestable antes de que sea demasiado tarde?
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