Ataque armado en Barrio México deja un inocente fallecido. Violencia urbana en Costa Rica preocupa cada vez más.
Hombre
muere tras ataque armado en Barrio México; era víctima colateral de un intento
de sicariato. Violencia urbana sigue en aumento.
San
José, Costa Rica. Un operario de construcción perdió la vida este viernes luego
de recibir varios disparos mientras realizaba una compra en una pulpería del
Barrio Claret, en pleno corazón de Barrio México. El ataque ocurrió a las 12:30
p.m. y tenía como aparente objetivo a una mujer, quien resultó gravemente
herida.
Este
hecho subraya la alarmante escalada de violencia en zonas urbanas del país,
donde cada vez más personas inocentes mueren como víctimas colaterales de
ataques dirigidos. La inseguridad en espacios públicos se ha convertido en una
de las principales preocupaciones para la ciudadanía costarricense.
Las
víctimas fueron un trabajador de construcción, quien falleció tras ser
trasladado al hospital, y una mujer que continúa en estado crítico. Los
agresores, dos hombres a bordo de una motocicleta, permanecen prófugos. El
Organismo de Investigación Judicial (OIJ) lidera la investigación.
“La
colaboración ciudadana es crucial para dar con los responsables. Cualquier
información puede marcar la diferencia”, indicó un vocero del OIJ.
De
acuerdo con reportes preliminares, los atacantes abrieron fuego sin medir
consecuencias, alcanzando a varias personas que se encontraban en las
inmediaciones del comercio. El tiroteo dejó una escena caótica y aterradora en
medio de un área residencial transitada.
La
Cruz Roja Costarricense atendió a las víctimas en el lugar y las trasladó de
urgencia. El trabajador falleció minutos después en el hospital, mientras que
la mujer continúa bajo observación médica.
Los
agentes judiciales encontraron al menos 12 casquillos de bala en el lugar, lo
que refleja la violencia con la que actuaron los sicarios. Todo apunta a un
posible ajuste de cuentas, una modalidad cada vez más frecuente en los
homicidios registrados durante este 2025.
Este
caso eleva a 16 las muertes colaterales registradas en el año, según cifras no
oficiales. La creciente tendencia preocupa tanto a las autoridades como a la
sociedad civil, que exige mayores medidas de seguridad. El OIJ continúa con las
pesquisas e insta a la ciudadanía a denunciar de forma anónima cualquier dato
relevante.
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