Periodista recibe disparo durante transmisión en vivo en protesta contra redadas migratorias en EE. UU.
Periodista australiana recibe bala de goma durante transmisión en vivo en protesta contra redadas migratorias en EE. UU.
Los Ángeles, EE. UU. – La periodista australiana Lauren Tomasi, corresponsal del Canal Nueve, fue alcanzada por una bala de goma mientras cubría en vivo las intensas protestas que sacuden el estado de California, tras una serie de redadas migratorias impulsadas por el gobierno estadounidense. El incidente quedó registrado en cámara, generando una ola de indignación internacional por el uso de la fuerza contra la prensa en medio de manifestaciones ciudadanas.
El hecho ocurrió el domingo por la noche en la ciudad de Los Ángeles, donde cientos de manifestantes se habían reunido por tercer día consecutivo para rechazar las políticas migratorias implementadas por la administración de Donald Trump. Durante la cobertura, en plena transmisión, se observa claramente a un oficial de policía girar hacia la periodista, apuntarle y disparar. Inmediatamente, se ve humo salir del arma y a Tomasi reaccionar visiblemente afectada por el impacto. A pesar del dolor, la periodista aseguró rápidamente a su camarógrafo que se encontraba bien.
Este incidente ha sido interpretado por numerosos medios internacionales y defensores de la libertad de prensa como una agresión directa a los profesionales de la comunicación, en un contexto ya tenso por la represión policial. La cadena australiana y la embajada de Australia en Washington han exigido explicaciones formales a las autoridades estadounidenses.
Lauren Tomasi es una reconocida corresponsal con experiencia en coberturas de conflictos sociales y desastres naturales. Su trabajo ha sido premiado por su rigor periodístico y valentía en zonas de riesgo. El hecho de que haya sido alcanzada por un proyectil mientras realizaba su labor informativa ha despertado preocupación sobre el trato a la prensa durante operativos policiales en Estados Unidos.
“No hay justificación para disparar a periodistas identificados mientras hacen su trabajo”, señaló en un comunicado la organización Reporteros Sin Fronteras. “El derecho a informar y ser informado es un pilar de toda democracia. Actos como estos socavan ese principio”.
El contexto de las manifestaciones es el endurecimiento de las redadas contra inmigrantes en situación irregular, ejecutadas bajo órdenes federales en ciudades consideradas “santuarios”. Las protestas, que comenzaron el viernes, se intensificaron tras conocerse imágenes de detenciones masivas, desalojos forzados y la deportación inmediata de personas sin el debido proceso legal.
La policía de San Francisco reportó que unas 60 personas fueron detenidas al final del domingo durante enfrentamientos con manifestantes. En sus redes sociales, el departamento indicó que los disturbios escalaron cuando “varios participantes se volvieron violentos”, atacando propiedades y vehículos oficiales.
Mientras tanto, en Los Ángeles, donde ocurrieron los hechos con la periodista, se reportaron vehículos incendiados, saqueos en zonas comerciales y uso de gases lacrimógenos para dispersar a la multitud. El ambiente sigue siendo de alta tensión, con un fuerte despliegue de fuerzas del orden y zonas del centro completamente acordonadas.
Expertos en derechos humanos advierten que el uso de fuerza letal no letal, como balas de goma, puede tener consecuencias graves e incluso permanentes, dependiendo del área del cuerpo impactada. En varios casos documentados durante protestas recientes, se han registrado daños oculares irreversibles y traumatismos severos.
El gobierno federal aún no se ha pronunciado oficialmente sobre el ataque a la periodista. Sin embargo, el portavoz del Departamento de Seguridad Nacional indicó que “se está revisando el protocolo de actuación de las fuerzas del orden durante manifestaciones masivas”. No se ha informado si el oficial involucrado será suspendido o investigado internamente.
Por su parte, la embajadora de Australia en EE. UU., Caroline Kennedy, declaró que “se ha solicitado una investigación inmediata y transparente”, además de garantizar la integridad de los ciudadanos australianos que cubren noticias en el extranjero.
El incidente también ha revitalizado el debate sobre la militarización de la policía en Estados Unidos, el trato a periodistas y la libertad de expresión durante estados de emergencia o disturbios civiles. Organizaciones de derechos civiles como la ACLU y Human Rights Watch exigen una reforma urgente en el manejo de protestas y el respeto a los derechos fundamentales.
Además de Lauren Tomasi, otros periodistas han reportado agresiones o intentos de intimidación en coberturas similares, lo que apunta a un patrón preocupante. “No es un caso aislado”, denunció la periodista estadounidense April Rodriguez. “Nos lanzan gases, nos empujan, nos marcan como enemigos, cuando solo estamos registrando lo que ocurre”.
El Colegio de Periodistas de Estados Unidos llamó a los medios a no normalizar este tipo de ataques y a documentar cada caso para exigir responsabilidades. Al mismo tiempo, medios internacionales expresaron su solidaridad con la periodista agredida, quien continúa su recuperación fuera de peligro.
En medio de la controversia, las manifestaciones siguen activas, y se esperan nuevas convocatorias en las principales ciudades del país durante los próximos días. Las organizaciones migrantes, por su parte, han convocado a una jornada de paro nacional este miércoles para protestar contra las políticas “crueles e inhumanas” del actual gobierno.
Este nuevo episodio refleja no solo la tensión social creciente en Estados Unidos, sino también la fragilidad de las garantías constitucionales cuando se trata de derechos civiles, libertad de prensa y políticas migratorias.
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